Un vecino de Alcora, de 73 años, falleció ayer alrededor de las 18 horas en la playa El Morrongo de Benicarló.
El hombre, que se encontraba pasando la tarde junto a su cuñada y su sobrina, decidió tomar un baño con consecuencias fatales. Fueron tres jóvenes las que dieron la voz de alarma cuando detectaron que el bañista
estaba boca abajo y apenas se movía. Aunque en un primer momento creyeron que estaba buceando, las jóvenes descubrieron, al acercarse a él para prestarle ayuda, que el hombre estaba inconsciente y rápidamente pidieron socorro.
Varias personas sacaron el cuerpo hasta la orilla y durante unos 45 minutos, primero los socorristas y, una vez llegaron, los médicos del SAMU- se emplearon a fondo para salvar la vida del hombre.
Lamentablemente, todas las maniobras de reanimación, incluido el uso de desfibrilador, resultaron nulas y los médicos sólo pudieron certificar el fallecimiento del bañista.
El cuerpo, cubierto con una sábana y custodiado por agentes de la Guardia Civil, permaneció durante algo más de dos horas en la playa hasta que el juez decretó el levantamiento del cadáver y su traslado para practicarle la autopsia que determine las causas del fallecimiento.
Aunque en el Morrongo ondeaba la bandera amarilla, que indica precaución, el hombre sabía nadar y conocía bien la playa pues, desde hace años, solia ir al Morrongo, acompañado de su sobrina, en los días de verano que pasaba en Benicarló.
El entierro será en Benicarló, donde viven sus familiares más cercanos y con los que estaba pasando unos días.
